Falta de talentos digitales impiden desarrollo digital en Marruecos
El informe que acaban de publicar las firmas consultoras de estrategia Guepard y ThinkONE, con el apoyo de Huawei Technologies denominado Digital Talent Review, tiene el mérito de haber ampliado el espectro de análisis de esta revolución digital en la que el reino se inscribe desde hace más de una década.
Así, durante más de cuatro meses, un equipo de 10 personas realizó 30 entrevistas de alto nivel, entrevistó a más de 600 personas clave, revisó informes internacionales relevantes y organizó una sesión de lluvia de ideas con la mayoría de los stakeholders comprometidos con el desarrollo digital de Marruecos, para desarrollar este documento de orientación más actualizado con datos científicos verificados y fundamentados.
Y uno de los elementos que llama la atención, además de la falta de una visión global de la transformación digital, es la falta de perfiles digitales agravada por las disparidades territoriales a pesar de todas las iniciativas existentes tanto a nivel del sector público como del sector privado.
Sin embargo, el recurso humano es un factor crucial en cualquier estrategia, especialmente cuando es disputado por otros países (fuga de cerebros). Además, el informe subraya que tener una estrategia clara y estructurada en términos de habilidades digitales ayudaría a Marruecos a alcanzar los objetivos establecidos en su plan digital 2025.
De todos modos, cabe señalar que esta escasez no es exclusiva de Marruecos. La región MENA está experimentando una escasez de capital humano digital, marcada por lagunas de habilidades e información.
Por ejemplo, en su estudio Future of Work de 2017, McKinsey encontró que en toda la región, solo el 1,7% de la fuerza laboral está compuesta por talento digital. En su última encuesta de habilidades para 2017, la organización Bayt / YouGov descubrió que los trabajos de TI se encuentran entre los puestos más importantes disponibles, lo que indica una grave escasez de talento y habilidades en la región.
De ahí el interés del informe, ya que al examinar la educación y la formación, resulta que la mayoría de las habilidades adquiridas por la fuerza laboral se adquieren a través de certificaciones profesionales (60%), seguido del aprendizaje basado en el trabajo (52%) y el autoaprendizaje (49%).
Más allá de la reforma educativa, los títulos deben reconsiderarse de manera integral y la transición entre la escuela y el trabajo debe ser más natural y flexible.
Con este fin, se ha desarrollado una herramienta única: “The Digital Job Matrix”, que proporciona un análisis completo del espectro de habilidades digitales en Marruecos.
La comparación de las brechas entre las necesidades de la industria, encarnadas por los talentos, los gerentes de recursos humanos, y la oferta universitaria, ha permitido reunir las áreas de discrepancia entre estos 3 actores.
80 programas identificados con 500 cursos relacionados con lo digital se enfrentaron a las necesidades de habilidades digitales de la industria derivadas del estudio.
Cada categoría de TIC se destaca con los requisitos del conjunto de habilidades críticas, así como roles similares compatibles con trabajos digitales, terminando con la descripción general de la industria y el empleo en Marruecos y la región.
El análisis de la matriz de habilidades mostró disparidades sustanciales entre las tasas de cobertura de las habilidades técnicas digitales por parte de las instituciones académicas. Así, de las 18 competencias técnicas digitales analizadas, 4 de ellas concentran más del 50% de la oferta digital del sector académico. Un desequilibrio en la oferta formativa que es evidente. Además, según los profesionales de las TIC, las competencias TIC más utilizadas se adquieren fuera de los programas educativos, a través de certificaciones profesionales.
Así, esta matriz de empleo digital es la herramienta propuesta para desarrollar recomendaciones clave para las autoridades públicas marroquíes interesadas en los programas de desarrollo del talento digital. Una especie de herramienta de toma de decisiones y gestión para crear un conjunto real de habilidades que cubra las necesidades reales de una economía digital que aspira a ser competitiva (inteligencia artificial, objetos conectados, computación en la nube, ingeniería de RF en telecomunicaciones, arquitectura soluciones de telecomunicaciones, RAN 5G, etc.).
