Condiciones de trabajo: Marruecos puede hacerlo mejor, según un estudio
Una reciente encuesta sobre la calidad del empleo en Marruecos, dirigida por Fouzi Mourji, economista y profesor de la Universidad Hassan II de Casablanca, indica un deterioro de las condiciones laborales tanto en el sector informal como en las empresas formales.
Esta encuesta tiene en cuenta varios factores que impactan en la calidad de vida de los trabajadores en el día a día: el acceso a vacaciones pagadas, la provisión de un contrato de trabajo, el acceso a un seguro de salud, el estrés, el exceso de trabajo y el acoso moral y sexual.
Los resultados del estudio muestran así que la calidad del trabajo del 35,75% de los empleados del sector informal es “mala”, mientras que es “regular” para el 39,82%, “buena” para el 23,08% y “muy buena” solo para 1,36% de los empleados encuestados.
Del lado del sector formal, las condiciones parecen ser mejores, con la calidad del trabajo del 78,17% de los empleados considerada “buena”, mientras que las condiciones laborales son “malas” para el 7,04% de ellos, “media” para el 6,34 % y “muy bueno” para el 8,45%.
“Todavía queda un largo camino por recorrer para mejorar la calidad de los puestos de trabajo en Marruecos. Desafortunadamente, esta situación no es específica del sector informal, hemos encontrado que todavía hay muchas fallas a nivel de empresas formales también”, subraya Fouzi Mourji para Le360 .
Según la encuesta, el 18% de los empleados del sector formal no tienen contrato de trabajo, y esta situación de precariedad afecta más a las nuevas incorporaciones. Además, siempre según el estudio, los empleados del sector formal están más expuestos al acoso sexual y moral que los trabajadores informales, quienes, sin embargo, sufren más estrés.
Para Fouzi Mourji, el deterioro de la calidad del trabajo en el sector formal se debe a la mala aplicación de las leyes vigentes ya la falta de conciencia sobre la importancia y el impacto positivo de mejorar las condiciones laborales para la economía y el crecimiento.
“Hay muchas cosas por mejorar en el marco legal, pero lamentablemente hemos observado que ni siquiera las leyes que existen se aplican. Por lo tanto, debemos hacer más esfuerzos a nivel de seguimiento y control para garantizar la aplicación y el respeto de la legislación ”, insiste el economista.
El deterioro de la calidad de los puestos de trabajo en Marruecos es también y sobre todo una pérdida de ingresos para los propios empresarios, que no aprovechan todo el potencial de sus empleados a causa de un entorno de trabajo desfavorable. “Un empleador que no tiene ninguna ventaja se vería inducido a proporcionar el mínimo esfuerzo diario. No trabajará más de lo que se requiere de él. Por el contrario, un empleado que trabaje en buenas condiciones siempre estará dispuesto a trabajar más y mejor. Es un intercambio de buenas prácticas”, subraya Fouzi Mourji.