El portavoz y la viceportavoz de Adelante Málaga, Eduardo Zorrilla y Paqui Macías, respectivamente, expresaron su apoyo a las trabajadoras del call center que trabaja con Unicaja Banco, quienes demandan el reconocimiento de sus derechos y alertan que se manejan datos personales de los clientes como si fueran empleados de la entidad financiera.
Silvia López y Ana María Gómez, trabajadoras de la empresa GDA (quienes están siendo atendidas por la organización política Adelante Málaga), ellas desarrollan labores de empleadas de Unicaja.
Atienden a los clientes del banco porque son la banca online y realizan las operaciones que les reclaman: “No sabe la persona que nos llama que quien maneja su dinero es un operador de telemárketing. Tenemos acceso a todos los datos personales, a sus productos bancarios, a sus deudas, ahorros; se le solicitan sus claves de seguridad y todo ello sin ser empleados de Unicaja y creemos que los clientes tienen derecho a saberlo”.
Ambas han denunciado a la empresa y al propio grupo Unicaja. Responden a preguntas de los periodistas que hay miedo en el sector de las teleoperadoras y por eso no se denuncia. De hecho, ellas llevan en la empresa 14 y 10 años y ha sido ahora cuando han acudido a los tribunales y “a luchar contra un gigante”.
Eduardo Zorrilla ha ahondado informando de que GDA es una sociedad limitada unipersonal, propiedad exclusiva del Grupo Unicaja y que lo que persiguen estas trabajadoras es alertar de lo que está pasando y reclamar sus derechos laborales.