El uso de la Inteligencia Artificial (IA) en los negocios trae aparejada una ventaja fundamental: la posibilidad de prever factores que pueden afectar su operación.
Lo anterior explica por qué su uso se ha vuelto -cada vez más- indispensable incluso para las PyMEs, lo que ha llevado a que exista una oferta de productos y soluciones que atienden esta necesidad.
Podemos resumir el caudal de ventajas aparejadas al uso de la inteligencia artificial de la siguiente manera:
- Mejorar procesos de venta, marketing y servicio al cliente.
- Optimizar los análisis financieros.
- Facilitar las recomendaciones de venta, de acuerdo a gustos y preferencias, de los consumidores.
- Atención personalizada de los clientes.
- Automatización de la atención al cliente a través de bots, chatbots, asistentes virtuales.
- Priorizar la base instalada de compradores y posibles interesados.
- Segmentar audiencias.
- Programar llamadas de atención y seguimiento conectando el contact center y el CRM.
- Eficientar procesos de logística, reparto y venta en ruta.
La gran lección para las PyMEs es dejar de ver a la IA como algo lejano o fuera de su presupuesto; por el contrario, con una mayor oferta de tecnología especializada en el mercado será más fácil acceder a su digitalización en beneficio de su funcionamiento y del servicio que ofrecen.