La ciberseguridad es un “mundo” cambiante, evoluciona constantemente a partir de actores que incursionan para generar riesgos.
Con la pandemia los riesgos en materia de ciberseguridad fueron alterados de manera vertiginosa, el cierre abrupto de las oficinas y el confinamiento forzaron cambios casi instantáneos y fundamentales en la forma en que la sociedad gestiona la ciberseguridad.
En palabras de Noopur David, CISO de Comcast: “Literalmente, tuvimos que reconfigurar la red sobre la marcha y agregar nuevas capacidades de defensa”.
La pandemia también atrajo repentinamente la atención de los ciberdelincuentes hacia nuevos sectores, cambió el perfil de las amenazas, un ejemplo es el sector de la medicina y el ataque a la creación de las vacunas.
También la industria financiera altamente protegida tuvo que luchar para cambiar su perfil de riesgo digital, como lo señala Ron Grenn, CSO de Mastercard: “Vimos un aumento masivo en los pagos sin contacto en el segundo trimestre de 2020. Como resultado, dimos más soluciones que el año anterior”.
Los ciberatacantes se reinventan, la ciberseguridad evoluciona.