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Crónica del coronavirus en un call center en Corea del Sur

Un estudio publicado sobre la propagación del coronavirus en un edificio de Corea del Sur muestra la efectividad de las medidas, aunque también ha ayudado a entender lo rápido que pueden producirse los contagios en espacios cerrados, por ejemplo, oficinas. 
Crónica del coronavirus en un call center en Corea del Sur
Crónica del coronavirus en un call center en Corea del Sur

En marzo, 97 de los 811 empleados de un call center en Corea del Sur, específicamente en Seúl, la capital, dieron positivo en coronavirus. De los que contrajeron la enfermedad, 94 eran compañeros de la misma planta y 79 estaban en el mismo departamento. 

Las autoridades sanitarias plasmaron en este gráfico la disposición de los puestos de trabajo de los empleados. En azul, se muestra dónde se sentaban quienes contrajeron el virus.

Ver gráfico https://www.businessinsider.es/contagian-44-companeros-call-center-corea-sur-630753

La imagen muestra cómo la cercanía habitual entre trabajadores, que además pasan muchas horas en contacto, favorece los contagios. 

El informe sobre el call center en seul concluye: “A pesar de que los empleados podían estar cerca en zonas como la entrada o los ascensores, los contagios se concentraron en la misma planta, la undécima, lo que deja entrever que el contacto prolongado fue lo que probablemente produjo la transmisión”. 

Fue el 8 de marzo cuando un empleado dio positivo, trabajaba en la planta 10 y nunca acudió al piso de arriba, donde se produjeron casi la mitad de los contagios, según el citado informe. Tras comprobarse que había contraído la enfermedad, se aplicó el procedimiento habitual de Corea del Sur. El edificio donde se encuentran las oficinas se cerró y, todo el mundo en el inmueble, tanto los trabajadores como residentes del bloque, se pusieron en cuarentena preventiva 14 días. En el edificio hay tanto oficinas, en los primeros pisos, como viviendas, en los más altos. Todos coincidían en el ascensor o en los accesos. 

Se hicieron pruebas a todos los empleados y residentes. Además, pasados los primeros 14 días, se hacía una segunda prueba a quienes habían dado negativo. En total, se hizo el test a 1.143 personas. 

Cualquier transeúnte que pasara cerca de la zona, estando en los alrededores al menos 5 minutos, recibía un mensaje que le avisaba de la exposición al virus. Se alertó a 16.000 personas, que además fueron redirigidas a hacerse la prueba. 

“Se han interrumpido las cadenas de contagios porque se ha hecho el test a todos aquellos que han estado expuestos al virus, de modo que se pudo aislar a quienes presentaban síntomas, pero también a los asintomáticos. Dado que la pandemia es global, recomendamos hacer un control activo de la enfermedad a las autoridades sanitarias de los países”, añade el estudio.

Mas de 1 mil test

De los más de 1.100 test que se hicieron en el edificio, 97 resultaron positivos. Cuatro pacientes no presentaron síntomas en un inicio, al realizarse las pruebas, y otros cuatro nunca los tuvieron.

El mayor número de casos tuvo lugar en la planta 11 del call center, donde los compañeros se sentaban cerca. De los 216 que eran, 94 contrajeron la enfermedad, es decir, el 43,5%.

Los test masivos en la población, los controles por vía telemática y la monitorización de los contactos han sido las medidas clave para contener el virus y aplanar la curva de contagios en Corea del Sur. 

Se mantuvieron actualizadas todas las aplicaciones y los datos de las personas infectadas, así como las zonas y barrios en los que se encontraban. 

El caso del call center, donde se actuó de forma inmediata y contundente, muestra el éxito de las autoridades para identificar los casos cercanos y para aislar a todo aquel que hubiera estado en contacto con la enfermedad. Esa ha sido la fórmula para mitigar los contagios.

Aylin Woodward ha contribuido en este artículo.

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