El desarrollo y generalización del pago móvil a toda la población marroquí es un verdadero desafío. Es en este marco que Bank Al-Maghrib implementó, desde el inicio de la crisis, medidas específicas destinadas a acelerar la adopción del pago móvil por parte de los usuarios. Hakima El Alami, jefe del departamento de Monitoreo de sistemas y medios de pago e inclusión financiera del banco central, explica en esta entrevista realizada por el portal leseco.ma y traducida para Parada Visual, los problemas y retos que enfrentan.
¿Cómo pueden las medidas previstas por la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera (SNIF) beneficiar la innovación financiera?
En todo el mundo, la innovación en los servicios financieros (pago, transferencia de fondos, ahorro, crédito y seguros) ofrece ciertas oportunidades para llegar a poblaciones excluidas por su lejanía geográfica o bajos ingresos, y contribuir así a la mejora de sus condiciones de vida. Es probable que el desarrollo de nuevos productos financieros contribuya en gran medida a la inclusión financiera y su extensión a los segmentos más vulnerables de la población.
Consciente de este tema, Bank Al-Maghrib (BAM) trabajó para promover el acceso de los actores no bancarios al mercado de pagos, adoptando, en 2014, la reforma de la ley bancaria, que introdujo una nueva categoría de instituciones no bancarias autorizadas, además de las instituciones de crédito tradicionales, para abrir cuentas y proporcionar servicios de pago. Estas denominadas instituciones de “pago” se crearon con el objetivo de desarrollar un entorno innovador y un mercado competitivo de pagos, en particular a través de servicios financieros móviles. Además, uno de los doce principios retenidos en el marco del programa Bali Fintech es promover el uso de Fintech para promover la inclusión financiera y desarrollar los mercados financieros. Así, las fintech podrían ampliar, gracias a la reducción de costes, el acceso a los servicios financieros, en particular a través del teléfono móvil.
¿Cómo lograrlo?
Marruecos tiene la intención de aprovechar la contribución de FinTech como parte de la implementación de su estrategia de inclusión financiera que, según la definición que hemos adoptado, “tiene como objetivo garantizar el acceso justo para todas las personas y empresas a los productos y servicios financieros formales para su uso, según sus necesidades y medios, con el fin de promover la inclusión económica y social, preservando sus derechos y dignidad”. Es en el marco de esta dinámica que Bank Al-Maghrib ha incluido el desarrollo y emergencia de las FinTechs entre los pilares de su estrategia digital 2019-2022. Ha establecido dos estructuras organizativas para apoyar este desarrollo. La primera es la ventanilla única Fintech cuya misión es apoyar, asesorar a las empresas innovadoras en el aspecto regulatorio y asegurarles un diálogo abierto con el regulador. La segunda entidad es el “Laboratorio de Innovación”, en fase de creación, que tiene como objetivo promover la aparición de ideas innovadoras, aportando valor añadido a las misiones del banco central.
Con el inicio de la crisis sanitaria, el pago móvil se ha impuesto con fuerza en el mundo. ¿Por qué Marruecos no ha seguido esta tendencia?
El desarrollo y generalización del pago móvil a toda la población marroquí es un verdadero desafío. En efecto, y como todo producto nuevo, la adopción y popularización de un nuevo uso, ligado a cambios en los hábitos de pago, puede requerir la implementación de ciertas medidas para eliminar las aprensiones de los clientes, usuarios y animarles a utilizar este método de pago.
Es en este contexto que BAM implementó, desde el inicio de la crisis, medidas específicas destinadas a acelerar la adopción del pago móvil por parte de los usuarios. En este contexto, podemos citar la autorización, otorgada a bancos e instituciones de pago, para abrir cuentas remotas para clientes de personas físicas, así como la simplificación de los trámites para la apertura de cuentas de pago de nivel 2 (tope de 5.000 DH), con la limitación de los trámites a la simple provisión del número de teléfono y el CIN digitalizado.
A esto se suma la flexibilización de los documentos requeridos para la inscripción de comerciantes locales para la aceptación del pago móvil, con el CIN y el número de licencia, para personas físicas no inscritas en el registro mercantil. Por su parte, los actores del pago móvil han acordado la implementación de precios atractivos para desarrollar usos y fomentar el uso del pago móvil. Asimismo, una estrategia de comunicación institucional ha sido definida por Bank Al-Maghrib, en colaboración con el Grupo de Pagos Móviles de Marruecos (GP2M), y cuya implementación está en curso.
¿Cuáles son los obstáculos que retrasan su desarrollo?
El éxito de este proyecto queda condicionado por la existencia de una gran red, que incluye tanto a los comerciantes que aceptan como a los agentes minoristas que deben facilitar a los titulares de M-Wallets, el pago de sus compras y las transferencias o retiros de fondos de los agentes de pago autorizados.
La parte de inscripción de comerciantes representa una fase crucial para el éxito de un ecosistema digital de extremo a extremo. Los establecimientos homologados están en proceso de captación de esta categoría de clientes, lo que requiere un especial esfuerzo de sensibilización, dada la novedad del sistema. Con este fin, y desde 2019, Bank Al-Maghrib ha presentado al Gobierno una serie de propuestas relativas, en particular, al establecimiento de incentivos fiscales para los comerciantes locales que acepten pagos móviles, eslabón central de este nuevo ecosistema.
Así, en el marco de la Ley de Finanzas Correctivas 2020, se ha adoptado una exención fiscal total de la base imponible, para los comerciantes locales, en relación con su facturación realizada por telefonía móvil. Además, BAM ha hecho especial hincapié, en el contexto del trabajo para la creación del SNIF, en la necesidad de que las autoridades gubernamentales refuercen la desmaterialización de las ayudas estatales y aceleren la implementación en lugar de operaciones piloto y fuertes incentivos dirigidos en una amplia y rápida adopción de este nuevo medio de pago, además de las acciones emprendidas por los propios actores privados.
¿Cuáles son, según usted, las innovaciones emblemáticas sobre las que Marruecos debería posicionarse absolutamente?
Bank Al-Maghrib, como regulador, debe dejar suficiente espacio para la creatividad y el desarrollo de servicios financieros innovadores, sin dejar de estar atento a los riesgos potenciales asociados con estas nuevas tecnologías. Al mismo tiempo, debe garantizar que preservamos y fortalecemos la resiliencia de nuestros sistemas financieros, al mismo tiempo que protegemos a los consumidores y las empresas, y nos mantenemos neutrales frente a las tecnologías utilizadas. Es un equilibrio difícil que supone una identificación de los riesgos y su clasificación, así como una anticipación de los efectos potenciales de las nuevas actividades financieras. Por supuesto, la innovación financiera es una oportunidad que hay que aprovechar, pero también constituye un gran desafío que hay que afrontar, y más particularmente para los países emergentes. Este desafío concierne tanto al sector privado como a las autoridades públicas, que deben implementar las condiciones necesarias para asegurar la transformación digital, ya sea en términos de infraestructura tecnológica, regulación de usos, recursos humanos calificados así como investigación y desarrollo.