Microsoft reveló a sus clientes que utilizan su herramienta Copilot, para generar creaciones a través de la Inteligencia Artificial (IA), que no deben preocuparse por reclamaciones de derechos de autor que pudieran surgir, pues la propia compañía que dirige Satya Nadella se hará cargo de resolver esos asuntos.
Se trata de un nuevo compromiso de Microsoft, derivado de la preocupación de algunos clientes sobre el riesgo de sufrir reclamaciones por infracción de propiedad intelectual si utilizan los resultados producidos por la IA Generativa.
La compañía dijo que ello es comprensible, dadas las recientes consultas públicas de autores y artistas sobre cómo se utiliza su propio trabajo junto con modelos y servicios de IA.
La empresa expuso: “Para abordar esta inquietud de los clientes, Microsoft anuncia nuestro nuevo compromiso de derechos de autor de Copilot. Cuando los clientes preguntan si pueden utilizar los servicios Copilot de Microsoft y los resultados que generan sin preocuparse por reclamaciones de derechos de autor, les ofrecemos una respuesta sencilla: sí, pueden hacerlo y, si se les cuestiona por motivos de derechos de autor, asumiremos la responsabilidad por los posibles riesgos legales involucrados”.
Este nuevo compromiso amplía su soporte de indemnización de propiedad intelectual existente a los servicios comerciales de Copilot y se basa en sus anteriores compromisos con el cliente de Inteligencia Artificial.
“En específico, si un tercero demanda a un cliente comercial por infracción de derechos de autor por el uso de los Copilots de Microsoft o el resultado que generan, defenderemos al cliente y pagaremos el monto de cualquier sentencia o acuerdo adverso que resulte de la demanda, siempre que el cliente haya utilizado las barreras de seguridad y los filtros de contenido que hemos incorporado en nuestros productos”, detalló Microsoft.
La compañía comentó que cobran a sus clientes comerciales por sus copilots, y si su uso crea problemas legales, es Microsoft quien debería convertirlo en su problema y no en el de sus clientes.
Agregó que esta filosofía no es nueva, ya que durante cerca de dos décadas han defendido a sus clientes contra reclamaciones de patentes relacionadas con sus productos y han ampliado de manera constante esta cobertura con el tiempo.
“Somos sensibles a las preocupaciones de los autores y creemos que Microsoft, y no nuestros clientes, debería asumir la responsabilidad de abordarlas. Incluso donde las leyes de derechos de autor existentes son claras, la IA Generativa ha comenzado a plantear nuevas cuestiones de política pública y arroja luz sobre múltiples objetivos públicos”, añadió.
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