A principios de la década, Microsoft y Google iniciaron sus batallas después de que la campaña publicitaria “Scroogled” del gigante computacional atacará directamente a la compañía del buscador en internet.
“Scroogled” expuso las malas prácticas que Google hace con los datos personales y privados de los usuarios. Con ello Microsoft pretendía ganar un nuevo mercado. Mark Penn fue el encargado de ejecutar esta estrategia publicitaria que puso a las compañías en jaque.
Microsoft es acusado de atentar con el funcionamiento de la web abierta, debido a que esta empresa apoyó una ley australiana que obliga a Google a pagar a los editores de noticias por su contenido.
Microsoft señaló que Google controla el mercado publicitario, obligando a los editores alrededor del mundo a funcionar bajo sus reglas y herramientas de SEO, donde la más beneficiada es la empresa fundada por Larry Page y Serguéi Brin.
El Financial Times informa que se suponía que el acuerdo entre Microsoft y Google también mejoraría la cooperación entre las dos empresas. Microsoft esperaba encontrar una solución para ejecutar aplicaciones de Android en Windows de la mano de Google pero no lo logró.
Anteriormente ya habían peleado por YouTube, posteriormente llegaron a un acuerdo que les hizo mantener sus asperezas al margen. ¿Cuál será la siguiente batalla?