Minsait, la compañía de servicios informáticos de Indra, presentó su propuesta de Open RAN con el objetivo de trabajar en la interoperabilidad de los distintos fabricantes de red, para impulsar el 5G y el 6G en Europa.
El desarrollo de una red de acceso móvil abierta, tal como lo proponen los impulsores de Open RAN, es una prioridad para las compañías de telecomunicaciones de Europa pues avanzar en esta dirección permitiría diversificar el ecosistema de proveedores de componentes, ahorrar costos y aumentar la competitividad.
Minsait se propone como la proveedora del software que se necesita para desplegar redes 5G y preparar la futura llegada del 6G, tecnología que ya tiene a los principales países del mundo, entre ellos los europeos, con proyectos de investigación, y cuya irrupción se estima para 2030. En la visión de la compañía la industria está marcada en la actualidad por la desagregación entre el software de las redes y el hardware, de acuerdo a un comunicado distribuido por la propia empresa.
En línea con los principales promotores de avanzar hacia una RAN abierta, Minsait aseguró que el escenario en que se encuentra Open RAN permitirá reducir el tiempo de desarrollo de la tecnología lo que, a su vez, permitirá dinamizar al sector con más alternativas.
Las interfaces abiertas y estándar que utiliza Open RAN favorecen el diálogo entre los dispositivos, más allá de dónde provengan, y la inteligencia artificial (IA) y el machine learning (ML) que incorpora el RAN Intelligent Controller (RIC) permitirán optimizar y controlar una red en pleno proceso de desarrollo e implantación.
Operadores como Rakuten -sin dudas, el líder de implementaciones Open RAN-, Dish y Vodafone, encaran con convencimiento sus propios despliegues bajo esta tecnología y apuestan a su mayor desarrollo a través de distintos proyectos que les permiten probar distintas alternativas y detectar cuáles son las que mejor se adaptan al actual escenario del sector.
Minsait en su comunicado, también admite que Open RAN se encuentra frente a numerosos desafíos como la necesidad de que se produzca el encaje óptico de los componentes de distintos fabricantes, la respuesta a incidentes de seguridad e, inclusive, la gestión y el mantenimiento de la red que, en su mirada, será más complejo. Es decir, la interoperabilidad toda la cadena.