El tecnoestrés se refiere a los efectos psicosociales negativos derivados de las tecnologías de la información y comunicación (TIC). La pandemia hizo necesario el trabajo en casa. Sin embargo, adaptarse a este nuevo esquema, ha resultado difícil para algunas personas.
La doctora Erika Villavicencio-Ayub, de la Facultad de Psicología de la UNAM, señala que una encuesta realizada en abril mostró que el 42% de las personas con tecnoestrés incrementaron sus malestares debido al home office durante la pandemia.
El incremento de casos con tecnoestrés se debe a que 7 de cada 10 trabajadores migraron sus actividades al hogar sin un buen entrenamiento o una buena política para llevarlo a cabo.
Otra de las razones por las cuales surge este problema es el abuso por parte de las empresas, cuando el personal de ésta se encuentra todo el tiempo conectado y atendiendo pendientes sin un horario laboral fijo.