La Unión Europea (UE) trabaja en un documento para reducir al máximo los trámites burocráticos que supone encarar despliegues de redes y ayudar, de ese modo, a que las operadoras de telecomunicaciones de ese continente, como Deutsche Telekom, Orange y Telecom Italia, entre otros, apuesten más fuertemente por inversiones en la quinta generación móvil.
Así lo reveló la agencia Reuters, que accedió a un documento de la Comisión Europea (CE) en el que se detalla que la intención del organismo es que la ciudadanía de ese continente acceda a conectividad en gigabits y que el 75% de las empresas que actúan en la Unión Europea usen infraestructura en la nube o tecnología basada en inteligencia artificial hacia 2030.
Estos lineamientos formarían parte de un anuncio de los ejecutivos de la Unión Europea, el próximo 10 de febrero, día en el que además deberá expedirse sobre la solicitud de estas operadoras que, junto con Telefónica, pidieron conformar un joint-venture publicitario orientado a plantarle competencia a los gigantes Google y Meta.
Las medidas sobre las que trabaja la Unión Europea para facilitar los despliegues – una demanda que se extiende de parte de todas las operadoras en todo el planeta – permitirían agilizar los trámites administrativos de tal modo que las compañías obtengan ahorros por 43,5 millones de dólares (40 millones de euros) por ese concepto. Costo que, asimismo, podría volcarse también al despliegue de infraestructura nueva y/o a mejores servicios e innovación.
El documento citado expresa: “Varios de los cambios propuestos tienen como objetivo hacer que las reglas y los procedimientos sean más claros, ágiles y simples, permitir que las partes entiendan fácilmente sus derechos y obligaciones y buscar promover sinergias (…) La propuesta también prevé orientaciones a nivel de la Unión (acceso a la infraestructura física, incluida la infraestructura en edificios, y algunos criterios de acceso y normas de coordinación de obras civiles) que deberían facilitar la aplicación coherente de las disposiciones pertinentes, así como la resolución de posibles litigios”.
Otra de las acciones que se conocerían en febrero es la orientada a permitir que las operadoras de telecomunicaciones accedan a la infraestructura física que es propiedad estatal o está controlada por entidades del sector público, más allá del lugar en que se encuentren ubicados. En otras palabras, habilitar la compartición de infraestructura en todos los niveles.
Facilitar los despliegues de 5G y pugnar por alcanzar velocidades mucho más altas al final de la década es coincidente con otras acciones que encaran operadoras, gobiernos y academia en la Unión Europea y que tienen que ver con mejorar su posicionamiento tecnológico a escala global. Para 2030 se esperan los primeros desarrollos de la tecnología 6G, y son varias las iniciativas en marcha para profundizar la investigación y el desarrollo de la próxima evolución móvil.